sábado, 21 de julio de 2012


EL LIBRO DE ENOC



Y caminó Enoc con Dios, después que engendro a Matusalén, trecientos años,
y engendro hijos e hijas.
Y fueron los días de Enoc trecientos sesenta y cinco años.
Camino, pues, Enoc con Dios, y desapareció, porque le llevo Dios.

Génesis 5: 21 – 24


Enoc, séptimo en la generación de Adán, era un hombre justo y recto, y por esa razón se lo llevo Dios sin que el conociera la muerte.  Escribió su experiencia al caminar con Dios y los sucesos históricos de su época además añadió varias profecías respecto a Israel y la venida del mesías.

Este libro no esta incluido en el canon de las escrituras[1], pero como podremos ver; el libro era altamente aceptado por los cristianos de los primeros siglos.

De éstos también profetizó Enoc, séptimo desde Adán, diciendo: He aquí, vino el Señor con sus santas decenas de millares, para hacer juicio contra todos, y dejar convictos a todos los impíos de todas las obras impías que han hecho impíamente, y de todas las cosas duras que los pecadores impíos han hablado contra Él.”

Carta de Judas 1:  14 – 15

Antes en la misma carta de Judas también se hace una clara mención  al libro de Enoc:

Y a los ángeles que no guardaron su dignidad, sino que abandonaron su propia morada, los has guardado bajo oscuridad, en prisiones eternas, para el día del gran juicio.

Carta de  Judas  1: 6

También tenemos una mención importante de estos hechos narrados por Enoc en la primera epístola de Pedro:

“Porque si Dios no perdonó a los ángeles que pecaron, sino que arrojándolos al infierno (tártaro en el original griego) los entrego a cárceles de oscuridad, para ser reservados al juicio…”

2 Pedro: 2: 4

Muchos padres de la iglesia católica lo citan también en sus escritos, como Justino Mártir, Ireneo, Orígenes, Clemente de Alejandría y Tertuliano entre otros, consideran el libro de inspiración divina.

Finalmente el libro desapareció del canon de las escrituras tras el concilio de Laodicea en el 364 y estuvo perdido durante casi mil años.

Mi posición personal respecto a este libro es que es inspirado salvo a algunas partes que cada lector deberá considerar y que posiblemente hubo algunas manipulaciones durante el transcurso de la historia, pero el libro nos ofrece un  material excelente sobre la caída de los vigilantes.



[1] Solo es aceptado en el canon de la iglesia ortodoxa etíope y está escrito en idioma copto. 


Descargue acá el libro de Enoc




Este libro es cortesía de Frederick Guttmann R. y de su ministerio Project Magen:

http://www.projectmagen.com/

viernes, 20 de julio de 2012


LA CAIDA DE LOS VIGILANTES




Aconteció que cuando comenzaron los hombres a multiplicarse sobre la faz de la tierra, y les nacieron hijas,
que viendo los hijos de Dios que las hijas de los hombres eran hermosas, tomaron para sí mujeres, escogiendo entre todas. Y dijo Jehová: No contenderá mi espíritu con el hombre para siempre, porque ciertamente él es carne; mas serán sus días ciento veinte años. Había gigantes en la tierra en aquellos días, y también después que se llegaron los hijos de Dios a las hijas de los hombres, y les engendraron hijos. Estos fueron los valientes que desde la antigüedad fueron varones de renombre.
Y vio Jehová que la maldad de los hombres era mucha en la tierra, y que todo designio de los pensamientos del corazón de ellos era de continuo solamente el mal.
Y se arrepintió Jehová de haber hecho hombre en la tierra, y le dolió en su corazón.
Y dijo Jehová: Raeré de sobre la faz de la tierra a los hombres que he creado, desde el hombre hasta la bestia, y hasta el reptil y las aves del cielo; pues me arrepiento de haberlos hecho.
Pero Noé halló gracia ante los ojos de Jehová.
Y vio Jehová que la maldad de los hombres era mucha en la tierra, y que todo designio de los pensamientos del corazón de ellos era de continuo solamente el mal. Y se arrepintió Jehová de haber hecho hombre en la tierra, y le dolió en su corazón. Y dijo Jehová: Raeré de sobre la faz de la tierra a los hombres que he creado, desde el hombre hasta la bestia, y hasta el reptil y las aves del cielo; pues me arrepiento de haberlos hecho. Pero Noé halló gracia ante los ojos de Jehová.



Genesis 6: 1-8



Este pasaje es uno de los mas misteriosos de la biblia y habla sobre ángeles (hijos de Dios)[1] que bajaron del cielo para acostarse y tener hijos con las mujeres humanas.  Esta palabra traducida acá como gigantes en el hebreo es Nefilim, híbridos de naturaleza divina y humana producto de la unión entre ángeles y mujeres; su principal característica era su gran tamaño (por eso acá la palabra se traduce como gigante), pero tenían otros rasgos particulares: al parecer su piel era de color mas pálido y su cabello rubio o más claro que el de las personas de esa época.

Menciona también que estos hijos de ángeles caídos eran seres poderosos y de renombre a los cuales se les atribuyen grandes hazañas y la enseñanza de artes y distintas habilidades a los hombres. A partir del nacimiento de estas criaturas, se desencadenaron guerras y los hombres se volvieron violentos hasta el punto que Dios para deshacerse de estas criaturas y de la maldad que habían enseñado al corazón del hombre.

Este pasaje es notablemente corto y no podemos sacar tantas conclusiones de manera apresurada, pero hay literatura que complementa este pasaje, es el famoso libro de Enoc (séptimo desde Adán) quien camino con Dios y desapareció[2].


[1] Ver: Job 1: 6
[2] Ver: Génesis 5: 21-24